Cuando Kundera y Sijé ponen las palabras y Silvia la música........a la inmortalidad...



Hay personas que traspasan los límites. Personas que se olvidan de pagar visados para ir a lugares exóticos, que, ya sea por casualidad o por los sí’s de la vida, aparecen entre la multitud y se quedan esperando a que las luces de la ciudad se apaguen y la noche coja ritmo de swing para terminar con el mejor baile. 

No es que tengan la capacidad de perdurar, de no envejecer, de que puedan resistir a altas temperaturas o que aguanten durante más de dos horas la respiración bajo el agua. Bueno o quizá también, tendremos que comprobarlo. Simplemente, hay personas que tienen la capacidad de hacer de espejo, de hacerse querer aunque sea en silencio, de bailar la vida aunque no haya música, hay personas que sin abrir su corazón te hacen estar dentro de él,  hay personas que comparten su música, sus juegos, su mundo aunque a veces sea una película muda y en blanco y negro. 

Hay personas que tienen la capacidad de ser inmortales. Esta inmortalidad de la que habla Goethe no tiene, por supuesto, nada que ver con la fe religiosa en la inmortalidad del alma. Se trata de otra inmortalidad distinta, completamente terrenal, de la de quienes permanecerán tras su muerte en la memoria de la posteridad

Y tú para mí eres una de esas personas, que sin haber muerto ya sé que van a perdurar en mí como los buenos quesos.

Feliz no cumpleaños. 

"Con cierta parte de nuestro ser vivimos todos fuera del tiempo. Puede que sólo en circunstancias excepcionales seamos conscientes de nuestra edad y que la mayor parte del tiempo carezcamos de edad. En cualquier caso, cuando se volvió, sonrió y le hizo un gesto de despedida al joven, no sabía su edad. Una especie de esencia de su encanto, independientemente del tiempo, quedó durante un segundo al descubierto con aquel gesto y me deslumbre"

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